No se si se merece ganar o no, lo que está claro es que para mí es el mejor pues es cariñoso, detallista, guapo, atractivo, chinchoso y gracioso, me muero de risa con él. Es mi mejor amigo, quién me consuela cuando las cosas no salen bien y quien me anima a conseguir los objetivos. Se implica en todo, por eso la boda la organizamos los dos y estamos muy ilusionados.
Le quiero tanto por sus virtudes, como por sus defectos, aunque estos a veces me saquen de quicio. Es por eso, que después de 13 años sigo pensando que es el amor de mi vida.