No puedo quedarme sólo con un momento. Mi chico ha sido siempre muy detallista. Pero somos de ciudades distintas, y nuestro romance fué complicado por la distancia. De todas formas cada vez que venía o iba esa sensación de saber que al otro lado de la puerta iba a encontrarme con él, por fin... después de tantos días....
Ese primer beso que pone los pelos de punta, esas mariposas revoloteadas y esas noches interminables sin que nada ni nadie importase más que nuestro tacto.
Creo que esa sensación es incomparable. Se sufre mucho con la distancia, pero el regalo de por fín tener lo que tanto has echado de menos, es insuperable.