Hagamos un repaso por las bodas que han surgido a raíz del rey de los realities en nuestro país: Gran Hermano. Son muchas las parejas que se han formado dentro y fuera de la casa pero, ¿cuántas han decidido pasar por el altar?
Los primeros enamorados que no dudaron en darse el "si, quiero" fueron Eva y Emilio, de GH2. En Guadalix de la Sierra organizaron una ceremonia, retransmitida para toda España, en la que Alonso bendijo la unión entre los tortolitos. Pero ahí no quedó la cosa. Una vez fuera del programa, reafirmaron que querían estar juntos para siempre y celebraron una boda por todo lo alto.
Los siguientes en casarse fueron Ángel y Sabrina. Esta pareja tuvo enganchada a media España porque el guaperas no se decidía a hablarle claro a la rubia, que lloraba por él por los rincones. Y, encima, cuando parecía que iba a decirle cualquier cosa bonita, se lo escribía a escondidas en la mano, con lo cual nos quedábamos con las ganas de saber qué estaba pasando. Finalmente, Sabrina ganó el concurso y al poco supimos que Ángel estaba enamorado de ella pero quería esperar a que concluyera el programa para comenzar la relación. Un noviazgo que acabó en boda y, al cabo de unos años en ruptura.
Otra pareja que estuvo jugando al despiste fue la formada por Pedro e Inma. Costó que se formara porque la andaluza estaba coladita por los huesos del argentino Matías, quien se lió con la mitad de la población femenina de su edición.
El ganadero estuvo suspirando y sufriendo por Inma hasta que ésta realizó un intercambio de edición durante una semana y se dio cuenta de todo lo que lo echaba de menos. Así surgió el amor entre ambos, aunque las malas lenguas siempre han asegurado que a Inma le cambió el chip cuando vio que Pedro se perfilaba como ganador de los 300.000 euros.
El maño venció, se casó con la andaluza y tienen una niña.
Pero sin duda, la pareja que sorprendió a todos los seguidores de GH fue la formada por Raquel y Noemí. Se conocieron durante su participación en la tercera edición del programa. Noemí fue la primera expulsada del reality y, dada la mala sintonía con el entonces presentador (Pepe Navarro), dejó de acudir a las galas.
Durante sus apariciones en Crónicas Marcianas, las dos catalanas se mostraban muy cariñosas, bromeaban, había una amistad especial... Y empezaron a surgir los rumores. Marta López fue la primera en insinuar que las dos estaban juntas. Finalmente, fueron entrevistadas por Javier Sardá para confirmar los rumores. Noemí afirmó: "Me gustan los hombres, y me gusta Raquel". Meses después optaron por celebrar una ceremonia civil, donde las dos fueron vestidas de blanco pero, debido a un accidente de coche, la relación se truncó y se divorciaron.
Menos sonadas han sido las bodas de Ángela (recordada por ser la primera ciega en entrar a GH), Javier Palomares o la entrañable Desi, de Gran Hermano 4.
La primera entró a la casa anunciando que se casaba. Tenía mil y una dudas sobre si esa boda se llevaría a cabo o no, porque su novio podía ver algo durante la convivencia que le hiciera cambiar de opinión. Su chico estaba encantado con ella, de hecho le dio una sorpresa metido en una tarta nupcial. A la salida del programa hizo el clásico Interviú (des)vestida de novia y pasó por el altar.
De Javier Palomares se especuló siempre que era homosexual, por su tono de voz, gestos, modo de actuar y delicadeza con el pelo. Cansado de tener que defender a su novio, su chica calló la boca a todo el país con las fotos de la boda, donde los protagonistas fueron todos menos ellos. (Cuando se invita a grandes hermanos es lo que ocurre).
Y, ¿qué contar de Desi? Siento predilección por esta niña. ¡Cuántos recuerdos de su paso por GH4! Esa chica enamorada de Nacho, que luchó por el hombre de sus sueños contra viento y marea hasta conseguirlo. Una mujer incansable e ilusionada. Se quedó embarazada de él, pero la relación no consiguió prosperar.
La muchacha se marchó a Suiza y allí se casó con el que es hoy su marido.
Éstas son las parejas que se han casado después de su paso por la casa de Guadalix pero algunas ya iban unidas en santo matrimonio, como es el caso de Gemma y Carlos. Esta pareja catalana fueron novios toda la vida. Su misión consistía en simular ser dos completos desconocidos y lo hicieron muy bien. Sin embargo, los celos y las viejas rencillas acabaron con el matrimonio. A día de hoy no se pueden ni ver.
Y la última pareja casada en pisar la casa ha sido la formada por Ángela y Laura. Las ansias de Lis por obtener una piruleta de recompensa ocasionaron la expulsión de la mexicana y un gran enfado de Laura, que tuvo que ser sujetada por sus compañeros para que no agrediera a Lis.
Creo que no me he dejado a nadie, pero siempre puede haber algún despiste.