Buenas a tod@s, a continuacion os detallo una serie de circunstancias y sucesos ocurridos en el Hotel Las Lomas de Merida para que ninguna pareja le ocurra la misma situacion que nos paso a nosotros. Esta carta que espongo posteriomente fue enviada a la direccion nacional de la cadena que pertenece dicho hotel y a fecha de hoy todavia no me han contestado.
Estimado Sr/Sra:
Mi nombre es Sergio Crespo, residente en Mérida (Badajoz) y me dirijo a ustedes para comunicarle una incidencia acaecida en el Hotel Blue City Las Lomas de Mérida.
Mi futura esposa (Raquel Fernández) y yo teníamos reservado dicho Hotel para la celebración de nuestra Boda el día 12 de octubre de 2014. Por suerte o por desgracia, según se mire, el día 23 de agosto de 2014 asistí a una boda en el salón Mirador del mismo hotel en la cual se dieron una serie de circunstancias y hechos que a continuación detallo:
- Una vez que entramos en el salón nos encontramos la mesa llena de hormigas y no solo la nuestra, si no que varias mesas estaban en la misma situación. Se le comunicó al Jefe de camareros el cual ordenó cambiar el pan de la mesa pero manteniendo los mismo platos y cubiertos que había en la misma.
- Una vez sentados, sirvieron los platos de pescado (era el primer plato) sin habernos servido la bebida.
- La bebida que servían estaba caliente y la solución que optaron fue traer cubitos de hielos, que para los refrescos servía pero para la cerveza y el vino no.
- A una de las personas que estaba en nuestra mesa se le cayó el tenedor al suelo y pidió que se lo cambiaran. Pues tuvo que comer con el tenedor del novio ya que TODOS los camareros hicieron caso omiso a la petición de que se lo cambiaran.
- Cuando ya estaban servidos los sorbetes en nuestra mesa todavía no se había servido el primer plato en otras mesas.
- Mi novia pidió una menta poleo, pues lo tuvo que hacer en infinidad de ocasiones y a camareros diferentes ya que ninguno se la traía. Pasada media hora llegó la deseada menta poleo.
A todo lo descrito anteriormente hay que añadir la mala educación de algunos camareros, el desorden en el servicio, así como infinidad de situaciones más o menos importantes que no creo conveniente señalar, ya que seria muy extenso.
Ante todo lo mencionado, mi futura esposa (Raquel) y yo (Sergio) hemos tomado la decisión de no celebrar con ustedes la boda, ya que como podrá comprender, no podemos arriesgarnos a que se repita unos sucesos de tal índole en un día tan especial e importante para nosotros. Dicha decisión fue comunicada a la dirección del hotel, el cual comprendía nuestra situación y reconocía lo hechos sucedidos, ya que hay documentos digitales que demuestran todo lo descrito anteriormente.
El día 27 de agosto de 2014 se canceló el contrato que habíamos firmado para la celebración de la boda. Dicho contrato conlleva la entrega de 600€ en concepto de señal que la dirección del hotel se niega a devolverlo por incumplimiento del mismo. Creo que dicho incumplimiento no es solo por nuestra parte, ya que las situaciones acaecidas son suficientes para considerar que no se están cumpliendo con las exigencias mínimas que requieren la celebración de un día tan importante, por lo cual solicito la devolución de la fianza abonada en concepto de señal.
En caso de que la Dirección siga negándose a la devolución de la señal, nos tendremos que ver obligados a tomar otro tipo de acciones, no solo jurídico-administrativas, sino también del tipo social, ya que somos una pareja que hemos crecido en Mérida y conocemos a otras parejas que van a contraer matrimonio en las próximas fechas y no vamos a poder darles buenas opiniones del trato recibido por su parte.
Sin otro particular, quedo a la espera de sus noticias.
En Mérida a 27 de agosto de 2014