Mª Elena

Como mi ya marido (antes novio) es de Madrid y yo de Murcia y la boda se celebró en Murcia y practicamente todo el peso de la preparación lo llevé yo. Un amigo de la familia junto con una compañera suya me hicieron el reportaje fotográfico y vídeo, el florista fue un amigo de un amigo mío de toda la vida, por lo que me trató muy bien, el restaurante fue todo perfecto y se portaron muy bien, antes, durante y después, etc...La verdad es que parece que te va a faltar el aire preparando todo y más cuando llevas tanta presión y tanto peso de todo, pero al final sale todo perfecto. Gracias a mi tía y mi madre, escogimos un vestido precioso de ORONOVIAS y aunque al principio no tenía muy claro si iba a llevar velo o no, compré en Madrid en la tienda donde mi suegra se compró el traje de madrina un velo por si decidía llevarlo pero al final, me pusieron en la tienda donde me compré el vestido una mantilla del mismo encaje de mi vestido que era una maravilla y ahí me me dí cuenta que era imprescindible para ese día tan especial, que era el toque perfecto que le faltaba a mi vestido. En Murcia se tiene por costumbre llevar huevos a "Santa Clara" para que no llueva el día de la boda, y además tienen que ser 13 huevos blancos y como me faltaba tiempo para ir al convento a llevárselos, lo hizo por mí mi querida prima Cristina, que siempre está ahí en todos los momentos importantes de mi vida y aunque el día amaneció despejado, justo cuando llegué con el coche de novia a la iglesia empezó a chispear un poquito, paró y después de hacer el reportaje fotográfico llovió otra vez, pero no importó porque la boda salió preciosa, los invitados quedaron encantados y hay un dicho que dice: "novia mojada, novia afortunada". Hasta casi el mismo día, hubieron "sorpresas" con algunos invitados: unos que no avisan con tiempo y se dejan caer, otros que te confirman que van y luego no aparecen, etc... pero eso no debe hacer que la preparación del evento te haga perder más los nervios. Hay amig@s que te ayudaran en todo, que estarán encantados de colaborar en que tu día sea único y especial, y habrá otros a los que no podrás agradar porque es imposible poder agradar a todo el mundo. Mi consejo es que disfruten las parejas con la preparación de su boda; que no se preocupen de lo que piensen los demás sino de lo que realmente quieran hacer, porque es imposible poder contentar a todo el mundo y al fin y al cabo ese día son ellos los protagonistas .