Buenas noches, chicas. Me dirijo a vosotr@s por lo siguiente:
Entre mis amistades más íntimas he sido temida durante muchos años debido a mis bromas pesadas. Estábamos metid@s en un grupo de recitales poéticos y alli todos me temian, pues gastaba bromas justo cuando actuabamos (en los ensayos era buena) rollo: cambiar wisky por vinagre, meter sal en el cafe, echar polvos estornudantes detras de las bambalinas.... vamos que no me aburria y reconozco que era un palo porque imaginaos la escena de pensar que tienes que beber un chupito de wisky delante de mogollón de público, te lo tomas del tirón y ¡vinagre! y asi, normal que me temiesen jejejejeje.
Todo este sermón viene porque ... llevo 4 años sin gastar una sola broma pesada, pero claro, las ansias por hacerlo se acumulan y una lleva el vaso a puntito de rebosar. Entoncessssss, he pensado, que el momento más propicio para soltar todo esto es ¡al año que viene, el día de mi boda, en el convite! Si, solo asi podre aguantarme siendo una chica formal y ese dia .... la traca final. De momento solo tengo una pensada que es la de esconder los menus bajo el plato y ponerles o menus falsos o un papelito que ponga que no van a saber lo que van a comer en todo el rato (esa opción sería buenísima también).
Y ahora con esta explicación, debo deciros que tantos años siendo buena han hecho que se me colapsen las ideas para realizar bromas pesadas. Asi que... NECESITO VUESTRA AYUDA.
LLAMAMIENTO:
- Propuestas de bromas pesadas, muy muy muy muy pesadas a los invitados, incluidos los de la mesa nupcial (el novio no cuela que es peor que yo jejejejjee por eso dicen que somos tal para cual). No os corteis en serio: mis invitados no son nada repipis para esas cosas y no se lo tomarian a mal, asi que ¡dejemos volar la imaginación! y ayudarme a recuperar mi lado más divertido.
Miles de gracias.