Lo primero que hemos comprado para la boda (aún queda casi un año) son los detalles de los invitados, pero porque son un poco especiales.
Una de las cosas que primeramente nos unieron a mi chico y a mi cuando nos conocimos fue nuestro amor por el café y vimos en Instagram un reel de una novia amante del café que había decidido regalar a cada invitado una taza diferente.
Así que hemos decidido pasarnos el año comprando tazas (que al menos a mí me encanta pero no lo hago porque no tengo espacio donde dejarlas ni necesidad) todas diferentes y el día de la boda le pondremos una etiquetita con nuestro sello y cada invitado que elija la que quiera.
De momento llevamos 5 y pensamos comprar 45 (tenemos 55 invitados pero alguno nos fallara) y si finalmente nos falta alguna ya las compraremos los días previos.
¿Que os parece la idea?