Quiero poneros este escrito. Lo hice hace unos meses. Por si sirve de ayuda a alguien. Ahora son 3 abortos los que llevo a mis espaldas. Espero que ayude y recordad que somos mujeres fuertes!!
Sí, HE SUFRIDO UN ABORTO ESPONTÁNEO.
Al principio no sabía si contarlo. Luego me entraron las dudas de cómo enfocar un tema del que muchas veces nadie quiere hablar y se considera un “tema tabú”. Al final escribo esto tal cual me sale porque considero que es un tema que hay que normalizar en la sociedad y así ser más llevadero el proceso de duelo. Pasaré un mal rato mientras escribo éstas líneas porque duele... pero creo que es necesario hacerlo no solo por mí sino por las futuras mujeres que tengan la mala suerte de pasar por ello. El Domingo 7 de Abril perdí al que iba a ser mi primer hijo/a. Sí, se que hablar de hijo en etapas tan tempranas del embarazo es quizás decir mucho pero para tí es tu hijo, tu bebé, y desde el momento en que el test da positivo una ya imagina cosas. Piensas cómo va a cambiar tu vida con la llegada de tu bebé, cómo pintarás su habitación, qué cunita comprarás, incluso te planteas cambiar de coche porque claro ya cuando viajamos con nuestro perrito Peke vamos cargadísimos, y fijaos la tontería que incluso pensé cómo sería dar a luz en pleno Noviembre, un mes antes de las navidades, ya me veía yo mis primeras navidades con mi hijo/a. Y un sin fín de cosas. Me descargué una App para ir viendo cómo evolucionaba mi embarazo semana a semana, me despertaba cada día feliz y lo primero que hacía era tocarme la tripita y leer la App. Empecé a tener síntomas, muy poquitos gracias a Dios, solamente leve dolor y aumento en los pechos y mayor olfato. Todo iba sobre ruedas. Y con la ilusión que teníamos decidimos contárselo a todo el mundo cuando solo estaba de 3-4 semanitas. Fuimos a la primera Ecografía a la clínica Ruber Internacional de Madrid con mi ginecólogo Á.L, el mejor ginecólogo del mundo mundial. Salimos de allí súper contentos con nuestra primera Ecografía impresa en papel, no os imagináis la felicidad tan grande. Salimos de allí con una nueva cita para un mes después. Todo iba fenomenal hasta que hace unos días nos fuimos de escapada a Granada antes de pasar por Motril a recoger un reconocimiento para mi marido por el rescate que realizó de 12 inmigrantes en alta mar. Pero no llegamos a Motril. Empecé a sangrar marrón. Después ya rojo. Nos fuimos para urgencias y vimos el latido de nuestro bebé pero tenía bradicardia. Diagnóstico: amenaza de aborto. Nos quedamos helados, desencajados, salimos de allí sin saber qué decir ni qué pensar. Nadie nos había contado que ésto podía suceder y que de hecho es más común de lo que pensamos pero nadie habla de ello. La ginecóloga nos llegó a decir que de cada 5 partos atendidos en un día en el hospital 5 eran abortos espontáneos también, una burrada. Y amenazas de aborto muchísimas más. Sin pensarlo nos volvimos a Santa Pola y estuve con reposo absoluto y con la agonía 4 días más y sin parar de llorar. Dejé de tener síntomas de embarazo y yo como madre, SÍ MADRE, ya sabía qué estaba pasando, sabía que algo no iba bien, sabía que el corazón de mi bebé había dejado de latir y que en la próxima visita mi ginecólogo me haría expulsarlo y alomejor incluso un legrado. No hizo falta que llegase el día de la visita. Lo expulsé en mi casa, junto a mi marido. Fué una experiencia horrible, traumática y muy dolorosa. Las contracciones dolían pero lo que más duele es el alma. Sentí absolutamente todo el proceso. Ví a mi bebé salir de dentro de mí sin vida. Nadie me había contado que esas cosas pasaban y de una manera tan “de antiguamente” y en tu propia casa, sentada en tu water. Fué horrible. Nos fuimos para urgencias. Todo estaba limpio y no necesité legrado. Ahora es una simple regla. Quiero agradecer a mi ginecólogo Á.L del hospital Ruber Internacional de Madrid, siempre pendiente, siempre llamándome, tan profesional, tan humano, mi ginecólogo favorito. También agradecer al hospital Vithas de Alicante en concreto a la ginecóloga Alicia por ser tan maravillosa y comprensiva, mi ginecóloga para siempre en Alicante. Y por supuesto a mi marido Pascual, por ser tan estupendo, por estar siempre ahí y por aguantar y sufrir conmigo todo el proceso aunque al final no me haya comprado el bocata de jamón ibérico de bellota que me prometió hoy. Y agradecer a mis padres, mis suegros, mis cuñadas, mi hermana y toda la familia y amigas que han estado y me han apoyado. A nivel psicológico, físico, emocional, hormonal, la pérdida de tu bebé es horrible. Da igual de cuántas semanas estés. Da igual si no sabías aún el sexo. Da igual si no viste ni su carita. Era tu bebé. Sea como sea era tu bebé. Pero la gente no lo entiende. Ésto en la sociedad no se verbaliza, nadie lo cuenta, y de repente te encuentras con ello y no sabes por dónde tirar. Hay que empezar a normalizar éstas cosas y por eso me decidí a escribir y contar mi historia. Hay que hablar más de éstos temas y apoyar a esas mujeres, porque eran sus bebés, no eran fetos ni embriones. La tristeza, la rabia, la impotencia, el vacío y sobre todo el sentimiento de culpa son inevitables y también te preguntas porqué yo? Hay que verbalizar y empatizar porque ocurre más de lo que llegamos a imaginar. Ya no solo tienen que alienarse los astros para quedarte embarazada sino que te quedas embarazada y si todo va bien tendrás a tu bebé, no porque estés embarazada vas a tener a tu bebé no, solamente si todo va bien, porque pueden pasar miles de cosas. Palabras como “sois jóvenes” “ahora a buscarlo con más ganas” “todo llega” “estabas de muy poquito, eso no era nada” “alomejor venía mal y mejor así” pues no ayudan a la mujer, al contrario, esas cosas no se deben decir. Y todo eso viene por no verbalizar este tema como se debe y no darle la normalidad que merece. La gente no sabe qué decirte, no sabe cómo reaccionar y simplemente se curan en salud diciéndote “Ánimo”. Hay que empezar a apoyar a todas esas mujeres que como yo han pasado o pasarán por ésto, hay que hablarlo con normalidad, tiene que dejar de ser un tema tabú y así el proceso de duelo no será tan duro. Te ha pasado a tí y era tu hijo/a y es tu dolor y tu duelo pero NO ESTAS SOLA. No eres un intento fallido de ser madre, tú ya eras madre, aunque tus sueños e ilusiones se hayan esfumado de la noche a la mañana pronto vendrá tu bebé arcoíris. Es doloroso, nunca se olvida, vuelves a revivir todo y vuelves a llorar pero llega la aceptación y lo aceptas y vivirás toda tu vida con ello. Este escrito no es para alarmar ni para que penséis que os va a pasar, todo lo contrario, es para que sepáis que si os pasa no estáis solas, que se supera y se aprende a vivir con ello, que nos ha pasado a muchas y que hay que llorar con ganas unos días para luego tomar aire y venirnos arriba. El miedo siempre estará ahí hasta que tengamos a nuestro primer bebé en brazos. No nos avergoncemos de éstos temas, los abortos espontáneos están a la orden del día y si son tema tabú es por culpa de ésta sociedad porque todavía hay gente que culpabiliza a la mujer de éstas cosas y toda esa gente perdonarme la palabra es ignorante como yo lo era, porque los abortos espontáneos no se sabe porqué ocurren. El silencio no ayuda. Y no dar el lugar que se merece a ese bebé tampoco ayuda. Llegará la fecha en que tendría que haber nacido y seguirás acordándote. Por último quiero contar mi experiencia en el hospital IMED de Elche el cual no recomiendo para absolutamente nada. Fuí sobre las 11 de la noche, sangrando bastante, el ginecólogo de guardia estaba en su casa viendo la televisión (totalmente verídico) y no fué capaz de ir al hospital a verme, era una urgencia grave y él está de guardia y debió ir, yo estaba muy preocupada, ya no sabía si el corazón de mi bebé latía o no y tampoco sabía si me vendría una hemorragia más grave, tenía mucho miedo. Me mandaron para mi casa y me dijeron que volviese al día siguiente, así tal cual, y ese señor en su casa tan tranquilo. Por supuesto mi marido puso una reclamación y estamos valorando denunciar a ese “profesional” por llamarlo de alguna manera. No se dignó a ir al hospital a mirarme. Para eso pago seguro privado? Voy con amenaza de aborto, sangrando muchísimo y me mandan para mi casa. Incluso la médica que lo llamó por teléfono delante de mí no sabía qué decirme, al final tuvo que darme la razón. En definitiva y ya para acabar solo volver a repetir que el apoyo social en estos casos es muy importante y que si creéis que esto debe hacerse viral pido a mis contactos que lo compartan y que llegue muy lejos y animo a que todas aquellas mujeres que habéis pasado por ésto también contéis vuestra historia si queréis claro. Yo la he contado porque jamás piensas que algo así te puede pasar y te viene de repente y no sabes ni qué hacer y para dónde tirar y te encuentras sola y no sabes de qué va todo esto y después te das cuenta de que es más común de lo que creías como primeriza que eres. Y mi opinión es que hay que normalizarlo más y verbalizarlo más aunque suene ya pesado porque así ayudamos a todas las mujeres y también a toda esa gente que no sabe ni qué decirte cuando te pasa algo así. Muchas gracias por leerme, ahora toca recuperarse poco a poco y Te Amoooo neneeee!! #hastaelinfinitoymasallá #UDM #HospitalesRuber #draliciaesparza #VithasAlicante #Aborto #Abortoespontaneo #somosmujeresfuertes
El contenido del post se ha ocultado
Para desbloquear el contenido, haz clic aquí