Nos quedan 13 días para la firma en el ayuntamiento (ceremonia muy íntima + comida > 7 adultos) y 69 días para la gran celebración. Por momentos salto de la ilusión, de pensar que ya está aquí; por momentos lloro de la rabia, de la incertidumbre o de los nervios, por tantas cosas que han salido y están saliendo mal, pero no quiero que nada más estropee esto. Hemos llegado tan lejos, desde 2019 preparando todo, posponiendo, cambiando, quebrándonos la cabeza...
¡Crucemos los dedos por que nada más se tuerza (al margen de todas las consecuencias de la pandemia), que haga un poquito de sol para la firma al menos, y que haya mucha salud! Y en junio, que las circunstancias sean mucho más favorables para todo y para todos/as, y tengamos una boda feliz, tranquila y sin sustos.
¡Mucho ánimo a todas las parejas que siguen adelante este año y un abrazo enorme a las que han decidido aplazar, porque sabemos lo mal que se pasa! Creo que la espera merece de verdad la pena.