Durante la Edad Media y gran parte de la Edad Moderna, se realizaba en las iglesias cristianas de varios territorios de Europa una ceremonia llamada Adelfopoiesis, cuyo fin era la unión de dos personas del mismo sexo. Estas parejas convivían, compartían sus bienes, se cuidaban mutuamente e, incluso, se realizaba un enterramiento común al final de sus vidas. Fue la misma ceremonia que unió a los santos Sergio y Baco en el siglo IV d.C., los cuales fueron proclamados protectores de tales enlaces en los siglos posteriores.
Para nuestra boda vamos a rescatar y adaptar esta antigua ceremonia. En lugar de la Biblia vamos a usar el Código Civil. Y sí que vamos a hacer la unión de las manos con una cinta y nos darán velas encendidas. Hemos obviado todo el tema religioso. Solo se va a leer la Primera Carta de San Pablo a los Corintios (que hemos visto en varias ceremonias), ya que se trata de un texto que habla del amor. Nos parece muy bonito y lo leerá mi sobrino.
Os dejo un ejemplo de esta ceremonia, de un libro que hace un estudio pormenorizado del tema. Se llama Las Bodas de la Semejanza. Y demuestra que la Iglesia no fue en el pasado tan intolerante con los gays. El investigador encontró en muchas bibliotecas e iglesias de toda Europa, incluso en el Vaticano, libros eclesiásticos con esta cereminia.
Os puede servir de inspiración si no sabéis qué hacer en vuestra boda. Qué puede ser más bonito que unirse igual que lo hicieron nuestro iguales hace siglos