Hola chicas! Necesito desahogarme y en estos foros siempre acabo encontrando a gente que me entiende y hace que me sienta menos sola, menos "rara". Os cuento: tuve a mi enano en marzo del año pasado, llevaba todo el embarazo con la idea de probar lo de dar pecho y empecé con la lactancia materna al tener al bebé. La cosa es que ya en el hospital yo (siendo primeriza) ya notaba que algo no iba del todo bien, me dolía al mamar y en un día o dos ya tenía perlas de leche y los pezones con heridas. Me dediqué a preguntarle y pedir consejos a toda enfermera o auxiliar que entraba en mi habitación y todas parecían estar de acuerdo en que el pequeño se agarraba bien, que ya se pasaría el dolor. A la semana, con un dolor horrible, mirando foros por aquí me enteré que existían las pezoneras y las probé. Me fueron mucho mejor pero tanto la matrona como la pediatra me presionaban para que las dejara, diciendo que eso no debía usarse. Me encontré con mamás que me dijeron que ellas las habían usado siempre y que les había ido genial tanto a ellas como a sus bebés. El problema vino cuando, en una revisión, la pediatra me dijo que mi peque no cogía el peso suficiente, que tenía que suplementar (con mi leche, con un relactador). No encontré en ningún sitio y mi marido, harto de oír cada día cómo me quejaba de que me dolía y de notar que el bebé parecía tener más hambre, se armo de valor y fue a por leche artificial. Nos fue súper bien y empezamos con mixta. En aquel momento hasta me pareció una liberación: cada toma era un suplicio, encadenando una con otra, peleándome con las pezoneras... No sé, no lo viví tan traumático. Empecé a sacarme leche para dársela en el biberón y, al ir dejando de darle pecho directamente, en no mucho tiempo la producción me bajó y me pareció que ya podía dejar el pecho en paz y disfrutar de mi peque, aunque fuera con bibi.
La cosa es que, poco después, empecé a sentirme mal, súper sensible al tema lactancia. Ahora mismo escribo esto y me vienen lágrimas. Veo a las mamás que si dan pecho y me siento un fracaso y hasta peor madre. Ya sé que eso no es así pero pensaba que con el tiempo este dolor se iría y parece que ahí sigue. Cuando empezamos con la alimentación complementaria pensé que me entraría mejor, yo le cocino todo, con buenos ingredientes y nunca le he dado un potito. Pero de tanto en cuanto vuelve la pena: cuando veo a alguna mamá dar pecho, o cuando tengo al peque un poco pachucho siempre pienso que en mi pecho estaría mejor (aunque sé que hubo tomas en las que tenerlo ahí horas me superaba y quería huir).
Sorry por el tostón, necesitaba ponerlo por escrito, a ver si dejo atrás la pena.