He visto en otro debate (inicialmente esto iba a ser una respuesta a la pobre chica que lo preguntó jajaja) sobre la convivencia antes del matrimonio, que una chica lanzaba al aire una pregunta sobre las relaciones sexuales antes del matrimonio y nadie le contestaba.
He visto además que en tres páginas de comentarios solo había una chica que pensaba como yo, todas las demás apoyaban firmemente la convivencia antes del matrimonio y, entiendo yo, el sexo está implícito en esa convivencia.
ADVIERTO QUE ESTE POST ES MUY LARGO
Y QUE A MUCHOS LES PUEDE PARECER UN SERMÓN INFUMABLE
Lo acepto y lo entiendo. Por eso lo advierto desde ya, que lo lea quien quiera, que lo deje a medias quien quiera y que opine quien quiera, aunque -eso sí- estaría bien que las opiniones fuesen precedidas de la lectura total del tocho.
Lo único que pretendo es:
1. Conocer opiniones de personas que van a casarse por la Iglesia y la critican duramente a pesar de ello. Conozco varios casos de novios que viven juntos durante muchos años y luego, al no encontrar curas que quieran casarles, ponen a la Iglesia a parir. Por ejemplo.
2. Acercar un poco a la normalidad de la vida actual en España la visión de una católica que solo intenta desmitificar a los jóvenes católicos, atrapados bajo esa visión de puritanos, cínicos e hipócritas (que posiblemente en buena parte nos hemos ganado) que pesa sobre todos nosotros porque parece que nadie es capaz de creerse que nosotros mismos nos creemos lo que decimos.
Por motivos religiosos (imagino que son las personas sobre las que pregunta esta chica) lo ideal sería esperar. Otra cosa es que en la práctica se haga, puesto que no somos perfectos. Es decir, que veo complicado la compatibilidad a día de hoy y en este país de una persona que quiere tener vida social normal y además llegar virgen al matrimonio, hablando en plata. Y muy especialmente porque la presión social para no ser un bicho raro (una "estrecha", un "retrógrado"...) es altísima.
Todos queremos ser aceptados socialmente y, a día de hoy, la sociedad acepta mucho más el sexo que la castidad. Además de habernos metido en la cabeza la idea de que si no te acuestas con alguien no le conoces, lo que es ridículo y absurdo a poco que se le den un par de vueltas.
De hecho estoy segura de que muchos de los que estéis leyendo esto, leeréis "castidad" y sentiréis que yo vivo oprimida en mi Edad Media particular.
Una clara diferencia que la Iglesia establece con casi todo (si no todo) es la de los niveles siguientes:
1. Que se haga amenudo como algo normalizado y que no plantea siquiera debate (algo que, en términos de sexo, sucede en la convivencia).
2. Que se dé en contadas ocasiones, como si dijéramos "extraoficialmente", sin ser planeado y con arrepentimiento y propósito de enmienda, que es lo que se considera "esperar hasta el matrimonio". Que luego se logre con más o menos tropiezos en el camino es otra historia (y como la virginidad solo se juega a una carta...), pero creo que todo el mundo entiende la diferencia entre los dos puntos.
Lo del arrepentimiento no es cuestión de hacer un drama y pegarse con un látigo. Simplemente cuando te relajas y tus niveles de hormonas se tranquilizan, reflexionas y te propones no hacerlo más porque verdaderamente crees que es por tu bien y el de la persona que quieres. Punto. Te arrepientes de corazón y de corazón te propones no hacerlo más... y vuelves a "ser virgen". La Iglesia da infinitas oportunidades. Hasta 70 veces 7, ya sabéis.
No somos animales, por lo tanto es perfectamente refrenable en el 95% de las situaciones. En el otro 5% no es que no sea refrenable, es que por algún motivo no tenemos tan claro que sea por nuestro bien y nos dejamos llevar. O sea que lo de que es una necesidad biológica y todas esas milongas... nada, milongas. Físicamene es un apetito, no una necesidad.
Cuando crees que no debes hacerlo por tu propia felicidad y tu propio bien, puedes controlarte muy bien. Si lo ves como una prohibición de alguien externo no, claro.
Personalmente no creo que el sexo sea la base de una relación, como muchos dicen. Al menos no en las condiciones normales de una pareja sana con la complicidad que ya de por sí veo imprescindible para contraer matrimonio. Creo que el sexo es uno de tantos complementos que fomentan la complicidad en pareja. En el noviazgo puedes hablar de ello, hablar de todo. Nadie lo prohíbe. Puedes hablar francamente de todo. Y debes. Ser casto no es sinónimo de frígido. Igual que ser católico no es sinónimo de ser puritano.
Podemos hablar de sexo y nadie lo ve como algo malo o sucio. O nadie debería. Simplemente creemos que las relaciones sexuales traen el bien y la felicidad si se hacen dentro del compromiso del matrimonio, del "y prometo serle fiel, en la prosperidad y en la adversidad, en la salud y en la enfermedad, todos los días de mi vida", "hasta que la muerte los separe".
Me parece precioso, la verdad. No es algo sucio, es precioso.
Y, de verdad, no vivimos en el sufrimiento, frotándonos contra todo y contando los días para la noche de bodas. Como tampoco creemos que vamos a "arder en el infierno" si algo sucede una noche.
Simplemente creemos firmemente que es más sano para nuestra relación no tener relaciones sexuales hasta después de incluir a Dios en nuestra unión.
Y si yo, personalmente y hablando de forma honesta, pudiera borrar mis deslices pasados, los borraría... a medias, porque de todo se aprende. Si no los hubiera cometido realmente no hubiese sentido el arrepentimiento y la firme decisión de querer esperar. Y... bueno, el arrepentimiento no vale NADA sin propósito de enmienda, como creo que es obvio.
No creo que nadie tenga que medir a su pareja por cómo funcionan juntos en la cama, me parece absurdo. ¿Esto quiere decir que hay parejas que rompen por temas sexuales?
Me parece aberrante, pero sí, claro que las hay. Me parece el colmo de la frivolidad... muy especialmente porque ignora el poder de la confianza, la comprensión, del diálogo y de la complicidad, que todo lo arreglan. Ignora el poder del amor, en definitiva.
¿Cómo lo veo yo?
Conoce a tu mejor amigo, a la persona que trae paz a tu vida, a la persona que quieres ver cada mañana y cada noche, a la que quieres que tus hijos se parezcan y con la que quieres llorar y reír e incluso criticar a otras, a la persona que puede reñirte como lo harían tus padres y a la que tú también sermoneas como lo harían los suyos. O a la que puedes ponerle un pie sudado en la cara porque es graciosísimo o empezar una guerra de chuparos las caras.
Y ya tendréis tiempo de enseñaros dónde o cómo tocar otras zonas cuando veais obvio que os sentís tan agusto para ello que todo vendrá naturalmente.
Así lo veo.
Sin embargo yo no siento la necesidad de andar cambiando la mentalidad de los demás a calzador. Yo dejo mi opinión aquí. Si a alguien hace reflexionar sobre su propia vida o simplemente entender un poco la perspectiva desde este lado, fenomenal.
Yo no necesito cambiar a nadie, solo quiero lavar nuestra imagen!! xD
Si habéis llegado hasta aquí, merecéis un premio gordo!