Cada vez las vemos más, bodas que no tienen nada de tradicionales, en las que destaca la personalidad de los novios y que se cargan de un plumazo cualquier protocolo.
Algunos las llaman bodas millennials y tienen sus propias reglas:
1- Más que una boda, es una fiesta y los amigos cobran gran protagonismo.
2- Desaparece el banquete tradicional en favor del tipo cóctel o buffet, más desenfadado, con food trucks y comida internacional, como sushi hamburguesas o pizza.
3- ¡Viva lo DIY! Invitaciones, decoración y detalles hechos a mano por los novios, todo personalizado.
4- El vestido de ella y el traje de él no serán los típicos. De segunda mano, vintage, low cost, de color, dos piezas, corto... Cualquier cosa vale, siempre que refleje la personalidad de los novios.
5- Estas bodas suelen tener un hilo conductor, una temática que represente los gustos y aficiones de los novios.
6- La importancia de la música. Es probable tengan un grupo tocando en directo. ¡Puede que hasta toquen los novios!
7- Ceremonia con rituales especiales. Los novios optarán por un rito personalizado para darse el sí quiero.
8- Las redes sociales formarán parte del evento. Instagram se hará eco de las mejores imágenes de la boda.
9- Despedida de soltero obligatoria. Conjunta o por separado, pero habrá despedida por todo lo alto y será parte de la experiencia.
10- Fiesta preboda o postboda. Porque un día no es suficiente, seguramente habrá una fiesta la noche anterior o quizás una comida al día siguiente.
¿Y la vuestra? ¿Será una boda sin protocolos o más tradicional?