Hola chicas!!
Ayer fui por primera vez a probarme vestidos de novia con mi madre y mi suegra, y aunque yo en mi cabeza tenía la idea de que mi vestido quería diseñarlo desde 0 con una diseñadora… estuvimos casi 3 horas con ellas y me probé varios vestidos en este atelier y cuando me probé el mío, uno de Silvia Fernández, casi se me saltan las lágrimas. Con el resto de vestidos me veía yo vestida con un traje de novia, pero con este me sentí realmente una novia, muy yo, no sé explicarlo y cuando ya me pusieron el segundo velo, el primero no me convencía… me vi como una princesa. Mi madre, mi suegra y las del atelier me dijeron enseguida que se me notaba una luz en la cara muy especial ya desde la primera vez que me probé el vestido, que estaba preciosa, que era un vestido muy dulce, fino y delicado que iba completamente con mi forma de ser. No quería quitármelo. Tenemos que cambiarle algunos detalles y ajustarlo y todo eso, pero nos encantó y lo vi claro.
La cosa es que yo soy una persona súper indecisa y además, perfeccionista, una mezcla terrible. La gente me dijo cuando se enteraron que ya lo tenía… ¿tan rápido? ¿A la primera? Yo pensaba que me costaría horrores decidirme y ahora me entran unas dudas y unos miedos de pensar… ¿y si lo hubiese diseñado de cero y me hubiese quedado mejor? ¿Y si tenía que mirar otros lugares y otros vestidos y nos hemos precipitado? ¿Os ha pasado? La verdad que no sé cómo gestionarlo y no quiero que un proceso tan bonito como este lo tenga que vivir angustiada e indecisa, con miedo de "no acertar". Agradecería que me contarais vuestra experiencia si a alguna le ha pasado algo parecido. ¡Mil gracias de antemano!
El contenido del post se ha ocultado
Para desbloquear el contenido, haz clic aquí