Preparando mi boda, cruda realidad.

Bueno chicas, a lo largo de estos días hemos ido mirando sitios para la boda (supuestamente mi padre nos iba a adelantar toda la boda. Realmente a nosotros nos daba un poco igual porque nuestra idea principal era muy sencilla, y sabíamos como íbamos a hacer las cosas ) por fin teníamos el sitio escogido, pero ha sido entonces cuando mis padres han empezado a decir "Esque está muy lejos y hay gente que sí va en coche no podrá beber, mejor que célebres por la mañana la boda" "Esque los invitados de tu chico no os van a dar dinero y no me lo vais a devolver" "Mejor una ceremonia sencilla con nosotros y después con los amigos de tu chico (mi chico es africano, no sé si vais pillando ya por donde voy, a todo esto, yo soy una chica negra, adoptada por ellos) así no tenemos que estar incómodos" "Bueno, pues no voy a invitar a mis amigos (dice mi padre)" Me han estado molestando con mirar otros hoteles MÁS CAROS que esos no me podía PERMITIR. En definitiva, que me di cuenta que se hacían las cosas como decían ellos o nada. Al final me cansé y ya fui cruda con ellos, le pregunté a mi padre si nos iba a ayudar o no, la respuesta fue un rotundo NO (Realmente lo deseaba porque ya les dije que no me iban a condicionar por nada del mundo)
La cuestión es que ahora que vuelvo al plan inicial, me toca las narices porque mi padre se la dio de "YO, YO, YO" Delante de los familiares el día que se lo contó, cosa que yo no quería decir que me casaba hasta tiempo después, porque quería ser yo quien lo dijera.

Ahora que estoy rehaciendo los planes busco una boda muy íntima, ahora como les digo a todos los primos que tal vez no los invite.
En conclusión, aunque ya lo sabía, me fascina ver en mis padres la frase "No soy racista, porque tengo una hija negra, eso sí, vamos a dividirnos blancos y negros para no mezclar os. Flipante.