Hola chic@s!!! Ya ha pasado más de un mes de nuestra boda y la verdad que aún me emociono al pensar en ese día. Permitidme que os cuente un poquito cómo fue todo, ilustrando con algunas fotos que nos hicieron los familiares y amigos (aún no tenemos el reportaje oficial).
Mi maquilladora/peluquera fue Eva Vinagre Make Up y no puedo estar más contenta con ella. Aunque hicimos una prueba unos meses antes, el día de la boda decidimos hacer unos cambios y fueron muy acertados ^^ Eva me dio mucha paz en esas horas de preparación en el hotel que estaba cerca de la finca (a 10 min en coche). El tocado era el mismo que utilicé para mi primera boda y que me hizo una amiga de mi madre, solo que lo retocamos y cambiamos los tonos para esta ocasión. Decidí llevar el mismo porque me lo hizo totalmente a mi gusto y sabía que no iba a encontrar otro que me gustase más. Así que un poco de remake... y estaba perfecto. El vestido era de Pronovias, modelo Skellig.
El momento más emocionante, para mí, fue la entrada a la ceremonia. Escuchar mi canción, ir agarrada del brazo de mi padre y ver a mi chico, que sabía que estaba esperándome ahí porque quería realmente casarse conmigo... no lo puedo describir... Lloré de alegría, y creo que es la emoción más bonita que he sentido en mi vida. Lloraba y sonreía, y el maquillaje aguantó todo El lugar era idílico... el bosquecillo de la finca Mas de Sant Lleí con esa luz de la hora dorada... Según me contaron, más de la mitad de los asistentes lloraron.
La salida de la ceremonia también fue muy bonita. Literalmente nos bañaron en arroz y pétalos de rosas... Nosotros estábamos felices y veíamos que todas las personas que queremos, también lo estaban por nosotros.
Después fuimos a hacernos el reportaje en los jardines, mientras los invitados disfrutaban del cocktail... al que nosotros llegamos 20-30 minutos después con las bengalas de humo de nuestros colores favoritos: naranja y amarillo (las bengalas eran Pantera Rosa Produzione)
Luego pasamos al banquete en el bosque... Para mí era imprescindible que fuera en exterior... ¡Y madre mía! Recuerdo entrar con El Baile de Izal y pensar... ¡¡Está precioso!! El entorno, el servicio, la comida... y hasta el corte de pastel quedó precioso (y eso que siempre me ha parecido un momento un poco anticuado... tampoco lo cambiaría! Para nosotros, ese brindi tras el corte estaba dedicado a nuestros invitados... a darles las gracias por todo.
Y el baile nupcial... Lo abrí primero con mi padre bailando un vals... y después con mi marido con Something Just Like This (Coldplay) y con los fuegos fríos de Pantera Rosa Produzine. Los fuegos fueron un capricho mío al casarme el día (que no la noche) de San Juan... y aunque previamente a veces pensaba que igual no hacían falta... ¡¡No me arrepiento para nada!! ¡¡Fue un momento increíble!!
¡¡Aprovechad cada minuto!! Es un día único...