Buenas tardes comu!
En estos tiempos de incertidumbre me gustaría compartir con vosotros la experiencia que estamos teniendo al entregar las invitaciones. Para poneros en contexto, nuestra fecha inicial era el 3 de octubre de 2020, aunque teníamos las invitaciones hechas nunca llegamos a entregarlas, hicimos unas pegatinas para el cambio de fecha, 22 de mayo de 2021, y la semana pasada empezamos a entregar algunas en mano y a pedir direcciones para los que viven fuera de Madrid o en zonas restringidas.
No os negaré que en un primer momento tenía miedo al rechazo de la gente pero ha sido todo lo contrario. A los que ya se las hemos dado en mano les ha hecho muchísima ilusión, un grupo empezó a planear si pasar el fin de semana en un chalet de Airbnb todo el fin de semana para hacer preboda y postboda y me ha dado muchísima envidia porque yo también quiero!! Tengo claro que el dia de después me tienen allí, el de antes no que me conozco y no es plan de ir con resaca a mi propia boda... jajajajaja.
Otras chicas se pusieron a planear qué van a ponerse, una hasta ya tiene el vestido y además un armario lleno de otras bodas, así que planeamos pase de modelos para otra amiga y si le gusta alguno, adjudicado!
Otros ya nos dijeron que ellos en bus, que esa boda tienen que disfrutarla como nunca hasta agotar la barra libre... jajajaja.
Respecto a los que pedimos direcciones, en general también buen feedback, alguno ya dijo directamente que contáramos con ellos, otros que esperaban que no hubiera restricciones de movilidad para poder venir y alguno dijo la típica frase de "a ver como está la cosa para entonces", pero bueno los que dijeron eso ya sabíamos que buscarían excusas para no venir antes del Covid porque son como son y no les gustan nada las bodas, así que no nos sorprendió.
Y en general todo el mundo con muchísima ilusión, muchísimas ganas de boda, todos coincidían en que a ver si llega ya el día porque no pueden esperar más, tienen ganas de fiesta, de celebrar, de disfrutar y como dijo una amiga, de volver a vivir.
Quería compartir mi experiencia para animaros porque seguro que muchos de vuestros invitados también serán como los míos, también estarán deseando que llegue ese día y celebrarlo, disfrutarlo. No les importan las mascarillas, ni la distancia, ni las restricciones, les importa volver a vivir y salir del bucle en el que estamos.