Hola, muy buenas,
Me casé el pasado 18 de Julio, en Madrid. Estoy feliz, por fin, muy contenta y todos mis invitados y seres queridos me han trasmitido lo maravilloso que ha sido todo.
Por eso, os quiero trasmitir y poner por escrito recomendaciones y consejos a tod@s, ya que supongo que tanto las que os vais casar este año como aquellas que hayáis decido postponer al año que viene, tenéis incertidumbre, que por supuesto es lo más normal del mundo, y mi deseo es ayudar y transmitir buena experiencia!
¡Espero serviros de ayuda!
De primeras, para tener en cuenta, os digo que en mi familia hay mucha vinculación estrecha con la medicina, tanto mi padre como mi hermana mayor y algunos de mis primos son doctores, mi marido (¡recién casados!) es hematólogo, y bueno, yo, en mi caso soy fisio jeje, con todo, os quiero decir que no subestimamos la pandemia, y podéis fiaros de mis palabras.
En el momento en que se declaró la crisis sanitaria, decidimos mantener fecha y esperar la evolución de los acontecimientos, ya que, siguiendo los consejos de mi padre, siendo la boda en Julio, lo mejor no era precipitarse y observar. Además, el sitio de celebraciones se mostró flexible, y nos daba margen para anular con una semana de antelación, por lo que seguimos adelante.
A mi boda acudieron 135 invitados. No pudieron venir cuatro personas que vivían en el extranjero. Comprensible por ambas partes. Les preparé algo muy especial cuando nos veamos. Por lo demás, todo fue tal y como había soñado y planeado, porque la familia y el entorno de amigos venía con conciencia de pasárselo bien (se lo pasaron a lo grande) estaban muy contentos y las restricciones apenas se notaron.
Ahora os doy mis consejos, de mi experiencia en mi boda, tan solo requiere un mínimo de organización, esto hizo que tanto yo con mis invitados se sintieran cómodos, sin vivir incertidumbres o momentos incómodos.
Peluquería:
La peluquera vino a mi casa, también el fotógrafo. Ambos con máscara, e hicieron su trabajo como en cualquier boda. Estábamos mis dos hermanas y mi madre. Anécdotas y buenos momentos. Cómodos todos y sin incertidumbres.
En este aspecto, siendo un ambiente muy reducido (5-6 personas), todo empezó bien. Yo lo veo como la antesala a algo que viene y va a ser bueno…porque va a salir bien.
Son super amables y profesionales, con todas las medidas de seguridad. Las peluquerías de boda, al igual que iglesias y sitios de bdoa, saben perfectamente las medidas, pero por si alguna sois de Madrid, os paso el enlace a su web.
https://www.tobeaguilardelgado.es/
Asunto Iglesia, a tener en cuenta:
Los invitados de por sí, ante la situación, ya traen mascarilla. Así de bien se portaron mis invitados. No obstante, y muy fácil, decidimos traer 3 cajas de 50 mascarillas quirúrgicas. Importante: Con previa organización, hubo tres familiares de plena confianza, que se pusieron en la entrada de la Iglesia a repartirlas según iban llegando. La gente lo agradecía y respondió estupendamente. De hecho creerme, este gesto de organización de seguridad ya les alegra como para seguir disfrutando y sentirse expectantes ante mi llegada al altar para disfrutar del ritual en la iglesia.
Hay sitios donde comprar mascarillas, pero si las queréis de un día para otro, os paso un enlace de amazon, que a mí me funcionó:
Enlace a mascarillas quirúrgicas de amazon recomendables:
https://www.amazon.es/gp/product/B0886PBZ7K/ref=ppx_yo_dt_b_asin_title_o05_s00?ie=UTF8&psc=1
Para el interior de la Iglesia, calculamos que sí entrábamos todos, y lo que hicimos fue similar a la entrada de la Iglesia; es decir, teníamos otros dos familiares, que iban acoplando a los invitados, según ya habíamos acordado mi marido y yo, respetando las normas de distanciamiento. Consejo que funcionó: En los bancos de la iglesia, cada invitado tenía una nota con su nombre, a parte de las indicaciones de mis dos familiares. Los colocamos por familias o grupos de amigos que ya conviven o han estado juntos.
Y lo mismo, los invitados contentos de que se les tratase bien y educadamente, organizando con control y con seguridad y respeto ante el contexto.
Por lo demás, la ceremonia fue exactamente igual de increíble y maravillosa de cómo yo la fui imaginando. La música, el ritual, lecturas, flores, fotógrafo… nada cambió, de verdad, ya estábamos todos en la magia del ritual y la ceremonia.
A la salida, nos lanzaron arroz y aplaudieron, y el fotógrafo lanzó fotos de familia y amigos. Igual que siempre.
En el Cócktail, consejos facilidades:
Todos con mascarilla, y mascarillas bajadas para comer, obvio. A la entrada, pusimos un par de mesas con expendedores de gel y un rollo de papel. Nada del otro mundo, la verdad. También había otras dos mesas con geles en el otro extremo, como para delimitar la zona, donde cabíamos todos y era al aire libre. Baños y lavabos, también suministrados con gel.
¿Qué cambio una vez estaba dentro de la magia de mi gran día?
Por lo demás, todo fue igual, insisto, nos hizo un clima estupendo, muy soleado. El catering nos servía todo, superatentos. Lo hacen por protocolo, muy seguro e higiénico. El ambiente estaba relajado, animado, yo tenía en mente la boda de mi hermana, que fue el año pasado, y es que en alegría y protocolo y diversión, poco tengo que comparar, de verdad.
Banquete: No varió en nada a una boda normal,; tal y como lo tenía planeado de antes, mesas redondas, de 10 y de 12 personas.
Consejo; agrupad mesas de forma sencilla, por grupos de familias o grupo de amigos que sepáis que convivan, o ya estén de antemano en contacto en la actualidad. Es recomendable que no acopléis a alguien o una pareja que no haya estado en contacto con el resto de la mesa.
Entre ellos se regulan, se respetan, se conocen. Así se respira tranquilidad.
Barra libre, música y baile
La zona del baile era muy amplia y aunque estuviese en un interior, teníamos acceso abierto, por lo que había ventilación. Sin problema.
Pusimos varias mesas redondas altas, para que la gente pudiese, de forma instintiva, agruparse poco a poco, charlar y beber y mover las caderas al ritmo de la música. Las incluye el sitio. Fue de momentazos, todo buenas anécdotas. Tuvimos dj, que puso la lista completa de temas que le dimos y peticiones o de cosecha propia, elegidas por el dj. Nos dieron las tantas. Por supuesto que la gente bailó todo lo que quiso y de forma cómoda y segura, por supuesto. Lo dicho: con facilidades de seguridad, de unas mesas altas aisladas redondas que facilita el lugar, llevando la máscara (que acompañaba al atrezo de sombreros y pelucas y gafas), que para nada resultó incómodo, a fin de cuentas, todo se vivió con completa normalidad.
Me pusieron dos barras libres para que la gente no se agolpase, pero con las mesas redondas colocadas estratégicamente, los camareros, que se merecen un diez, iban atendiendo todas las demandas, por lo que nadie se quedó sin atender.
El puntazo para la fiesta y este momento de la boda, importante y aconsejable, fue dar como detalle para el recuerdo del dia, las bailarinas o manoletinas de Gift Empire, que como novia que se ha casado y como fisioterapeuta os las recomiendo totalmente, no sólo porque son preciosas y volaron, sino porque con los tacones y el cansancio del día, después de la iglesia, cocktel, banquete.., las mujeres con los tacones tenemos riesgos de lesiones. ¡No os podéis imaginar la cantidad de pacientes que tengo con lesiones por los tacones! Pienso que este detallito que os aconsejo no sólo sirven para el baile (que hace que nos movamos y bailemos como en casa!!), sino que éstas hacen que toda la planta del pie se relaje, evitando lesiones (tendiditis, esguinces, caídas resbalones…). Lo agradecieron como remate de regalo para llevarse a casa como pedacito de felicidad de la boda, y valorándolo al máximo como medida de protección de pies y disfrute del momento fiesta!
Muy fácil y servicio rápido. Los encontré en bodasnet. Os paso enlace:
https://www.bodas.net/bodas/proveedores/detalles-de-bodas
Mi boda fue maravillosa. Y espero que con estos consejos, de primera mano y que a mí, y a mis invitad@s les funcionaron, os trasmita confianza a vosotr@s.
¿Qué he tenido que postponer? Pues el viaje de novios, pero sinceramente no me importa tanto; el viaje puede esperar al año que viene, que será perfecto. Lo que no podía esperar era que tanto yo como mi marido llevásemos la alianza que ha sellado nuestro amor.
¡Besos y ánimos a todas las prometidas del mundo!